Los Placozoos

         

         El tipo zoológico (Phylum) de los Placozoos es relativamente reciente, propuesto en 1972 por K. G. Grell. Consta de una única especie descubierta por casualidad en un acuario marino en el instituto de zoología de Graz en Austria, el Trichoplax adhaerens Schulze, 1883.

 

Representación gráfica de un Trichoplax adhaerens

       Otra especie, el Treptoplax reptans, podría también pertenecer a este filo, pero desde su descripción en 1896, nadie ha vuelto a observar a este animal con lo que no se sabe si existe realmente.

       En un principio se pensó que Trichoplax podría tratarse de una larva de cnidario, pero al hallarse ejemplares libres en la naturaleza en diversos mares como el Mediterráneo o el Caspio, y ver como se produce su reproducción asexual y como en ciertas condiciones produce gametos, se descartó la hipótesis de la fase larvaria.

        A pesar de que de momento aún se está estudiando su genoma y su posición filogenética, recientes pruebas genéticas sugieren que los Placozoos están más próximos a los Cnidarios que a los Poríferos o esponjas, junto con los que se les engloba normalmente en el grupo de los parazoos al considerarse animales con tejidos parcialmente diferenciados pero sin ningún órgano o sistema nervioso o muscular. Así que en realidad en lugar de parazoos podrían tratarse de los eumetazoos más básicos conocidos vivos.

        Se trata de un animal pequeño con forma de placa laminar de unos 2 o 3mm de diámetro y recubierto de cilios lo que le da un aspecto de placa peluda que se adhiere a los sustratos, de ahí el nombre de su género y especie.

        Carece de simetría, órganos, de sistema muscular, de sistema nervioso y células nerviosas, aunque las evidencias moleculares sugieren que puede provenir de organismos que sí poseen células nerviosas. Consta de unos cuantos cientos de células de cuatro tipos dispuestas en tres láminas:

  • Un epitelio dorsal de células monociliadas. En esta lámina también aparecen distribuidas regularmente unas inclusiones de lípidos llamadas “esferas brillantes”.

  • La lámina intermedia es una cavidad que contiene fluido y células fibrosas sincitiales.

  • Un epitelio ventral de células monociliadas, entre las que se encuentran también células glandulares no ciliadas.

 

         Los dos epitelios carecen de lámina basal, por los que las células se mantienen unidas por un cinturón de desmosomas.

         Para alimentarse se deslizan sobre su alimento. Básicamente se trata de protozoos, algas y detritos. Para ello realizan una predigestión extracelular entre la parte inferior del cuerpo y el sustrato en la que vierten enzimas digestivas para luego absorber el alimento.

        Su reproducción sexual es desconocida en toda su extensión a día de hoy, pero existen evidencias de ella en el genoma de Trichoplax. Se sabe que pueden producir gametos, pero hasta el momento no se ha podido observar el desarrollo del huevo más allá del estado de 32-64 células.

        Habiendo varios ejemplares de placozoo en una placa, son capaces de establecer relaciones simples entre ellos.

        La reproducción asexual puede darse por distintas vías, bipartición, fragmentación o gemación por ejemplo son observables fácilmente en laboratorio.

 

 

Representación de una sección transversal de Trichoplax en la que se aprecian las tres láminas.